En el Día Internacional de Apoyo a las Víctimas de la Tortura, se hace un llamado a preservar el Palacio de la Sonrisa como un museo histórico de los derechos humanos en Magallanes.
El Palacio de la Sonrisa en Punta Arenas simboliza la sistematización del uso de la tortura durante la dictadura en Magallanes, especialmente en el período de 1973-1976. Esta casa encierra la historia de los tormentos sufridos por un gran número de hombres y mujeres magallánicos, y forma parte de la oscura historia de los derechos humanos en Magallanes.
En los campos de concentración y centros de detención, la tortura fue el método central de represión. Se estima que alrededor de 2000 ex presos políticos magallánicos fueron sometidos a esta terrible experiencia. Los testimonios que se han hecho públicos y la información que estamos difundiendo en Dawson2000.com empiezan a revelar la brutalidad de estas acciones. Estos testimonios resaltan las torturas sufridas en el Palacio de la Sonrisa como una parte fundamental de las violaciones cometidas contra los presos políticos magallánicos por la dictadura.
La tortura vulnera las convenciones de derechos humanos que Chile reconocía antes de 1973, como la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948, la Convención de Ginebra III de 1949, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos de 1966 y la Convención contra la Tortura de 1984, a la cual Chile se adhirió en 1988.
La impunidad y el olvido de los delitos de tortura son inaceptables para aquellos que fuimos torturados por el Estado durante la dictadura militar en las tierras magallánicas. La erradicación de la práctica de la tortura en Chile requiere el reconocimiento y repudio público de estos actos por parte del Estado, el fin de la impunidad de los torturadores y la reparación moral y material de las víctimas.
Dentro de este contexto, conservar el Palacio de la Sonrisa como museo histórico sería un reconocimiento moral a las víctimas de la tortura en Magallanes y contribuiría al desarrollo cultural de los derechos humanos en la región y en el país.